¡Sáquele provecho a su aguinaldo!
A lo largo del año, todos esperamos el ansiado aguinaldo en el mes de diciembre. La palabra “aguinaldo” es sinónimo de motivación, salario adicional, alegría, ayuda, ahorro y facilidad para muchas personas, e incluso, aguinaldo para otros significa marchamo del vehículo.
Sin embargo, un adecuado orden de las finanzas y el aguinaldo es de vital importancia para la salud financiera y sostenibilidad de las personas. Es indudable que, algunas veces, muchos cometemos el error de gastar desmesuradamente ese dinero extra que devengamos por el gran esfuerzo laboral realizado por 12 meses, iniciando enero con un sentimiento de arrepentimiento por no haber administrado de una manera óptima ese dinero.
Por eso, la vicepresidenta de Relaciones Corporativas de BAC, Laura Moreno, propone el siguiente plan para la administración del aguinaldo:
Destinar un 25% al pago de deudas atrasadas o adelanto en caso de estar al día; otro 25% para mantenimiento de activos, como el carro, la casa, etc. Un 25% para los gastos de Navidad, fin de año y las actividades sociales, y un último 25% en ahorro e inversiones.
La distribución y porcentajes pueden variar de persona a persona, ya que todos tenemos diferentes prioridades y responsabilidades. Pero, más allá de verlo como porcentajes solamente, el mensaje está en realizar un autoanálisis consciente de la situación actual de nuestras finanzas y ejecutar un planeamiento o presupuesto antes de incluso recibir el aguinaldo. Ese honesto planeamiento previo dictará la cantidad de dinero destinado a cada una de las categorías que la persona crea conveniente.
Si se le toma la debida importancia y respeto a la distribución planeada, se podrá combatir contra la famosa “cuesta de enero”, o bien, esa cuesta será mucho menos pronunciada y nos ayudará a empezar el año mucho más tranquilo. El objetivo principal no es no gastar el dinero, sino, gastarlo, ahorrarlo e invertirlo de una manera más responsable y sostenible, al fin y al cabo, es un premio al esfuerzo que todos merecemos.
